Teoría sintética de la evolución

Entre las décadas de 1920 y 1940, se creó la teoría sintética de la evolución, que postula que la evolución es un cambio gradual y continuo, guiado por la selección natural y responsable de cambios que afectan a las poblaciones, así como también de grandes cambios que controlan la aparición de nuevas especies. Según esta teoría, la selección natural es el principal mecanismo evolutivo, pero exiten otros posibles, que se rigen por los mecanismos de la herencia. Algunos científicos que aportaron al desarrollo de esta teoría fueron Theodosius Dobzhansky (genetista); Ernst Mayr, Julian Huxley y G. Ledyard Stebbins (biólogos); y George G. Simpson (paleontólogo), entre otros.


Gradualismo, equilibrios puntuados y saltacionismo

El gradualismo postula que los grandes cambios resultan de la transformación gradual y la producción constante de pequeños cambios, y que la ausencia de estadíos intermedios en el registro fósil es producto de un registro incompleto e imperfecto, ya que es imposible que queden preservados en el registro fósil absolutamente todos los sucesos que ocurren sobre la Tierra.

El modelo de equilibrios puntuados sostiene que la selección natural actúa entre especies y no dentro de una misma especie o linaje como propone el gradualismo. Los grandes cambios evolutivos, a partir de los que surgen nuevas especies, ocurren en períodos relativamente cortos (decenas de miles de años); una vez originadas las nuevas especies continúan prolongados períodos de pocos cambios o estabilidad evolutiva. Las especies surgen por la transformación de unas en otras, sólo que dicha transformación no es gradual, sino que los cambios son tan rápidos que aparecen como discontinuidades al analizar el registro fósil.

El saltacionismo sostiene que las nuevas especies no se generan por modificación de especies anteriores, sino por la aparición abrupta de grandes cambios genéticos y mutaciones que dan origen a nuevas especies completamente distintas de las anteriores.

Adaptado de Biología 2, Ed doceOrcas, 2016